La empresa de aviación española renunció a adquirir los siete Bombardier
CRJ900 por los que ofertó, el 1° de octubre, US$ 137 millones en una
subasta pública
La empresa española Cosmo no comprara los aviones Bombardier de Pluna"Recibimos una comunicación" en ese sentido, declaró el ministro a canal 4. Cuando se oficialice la decisión de la empresa española, el fideicomiso reclamaría la garantía de 14 millones de dólares que obtuvo Cosmo para presentarse a la subasta.
El martes la empresa española había incumplido el pago de unos 800.000 dólares de comisión a los rematadores que se encargaron de la subasta, salteándose el primer paso para concretar la compra de los aparatos.
Desde la subasta, la venta de los aviones ha sido cuestionada por sus ex empleados y la oposición, en medio de intensas especulaciones sobre el procedimiento de venta, mientras el Gobierno negocia para encontrar un nuevo interesado en quedarse con los aviones y en operar las conexiones aéreas, que se vieron fuertemente afectadas tras la quiebra de Pluna en julio.
Con 900 empleados, Pluna operaba 253 vuelos semanales entre Argentina, Brasil, Chile y Paraguay. Creada en 1936, la aerolínea pasó a manos del Estado en 1951 pero volvió a incorporar capitales privados en 1995, cuando se convirtió en sociedad anónima tras asociarse con Varig.
La asociación duró hasta la quiebra de la brasileña en 2006, cuando el Estado uruguayo absorbió el 49% del paquete accionario que poseía Varig.
En 2007 el grupo inversor LeadGate se quedó con el 75% de las acciones y el Estado, con el 25% restante. El acuerdo duró hasta junio de este año, cuando el consorcio se retiró de Pluna. Menos de un mes después, Pluna quebró.
El vicepresidente Danilo Astori dijo esta semana que además de los problemas financieros de la compañía, la cantidad de juicios contra Pluna iniciados en Brasil por ex empleados de Varig "fue un elemento decisivo" en la decisión del Gobierno de declarar la quiebra de la aerolínea.
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